Bueno, vayamos por partes.... La capital de Canada no es ni Montreal ni Toronto, las dos grandes urbes de este pais. La capital es Ottawa (lease Otaua, que nombre mas ridculo no?).
Bien, una vez superado este primer dilema de cultura geografica, pasemos a hablar un poco mas de la visita que la pareja hizo a esta ciudad el pasado finde, del 26 al 27 de enero de 2008. Tampoco nos costo mucho plantearnos la visita, ya que Ottawa es una de las pocas cosas que quedan a tiro de Montreal en coche y en menos de dos horas, por no decir la unica. Canada es grande de narices y, en cuanto quieres plantearte una visita a alguna parte interesante del pais, o te planteas 12 horas al volante o te compras un billete de avion. Tambien queda la posibilidad de cruzar al lado americano, con ciudades como Boston, NY, etc... pero es que ya solo el hecho de tener que cruzar la frontera y vertelas con los de inmigracion, a mi personalmente es que me entra la temblequera y prefiero quedarme por estos lares, no sea que la liemos.
La capital de Canada es fiel representacion del bilinguismo del pais (anglais-french :p). Esta en la frontera entre el estado anglofono de Ontario y el francofono de Quebec, solo separados por el rio Outaouais (cinco minutos para escribir el nombre... complicado verdad? ajo y agua con el frances....). Por propia experiencia, el 99% de los habitantes de Ottawa hablan los dos idiomas, aunque generalmente el principal es el ingles. El numero de habitantes oficial es de 800.000. Definitivamente, Ottawa se puede catalogar como ciudad "finde", es decir, de visita mas que sobrada en un par de dias o incluso en uno. La principal ventaja de esta ciudad es que es sumamente tranquila y no tiene el caos de trafico como sus vecinas Toronto y Montreal. Nosotros dejamos el coche el viernes noche en el hotel y no volvimos a saber de el hasta el domingo. Relajacion total en ese sentido.
En cuanto a alojamiento, el viaje fue en plan ahorro y apostamos por un B&B (cama y desayuno) bien recomendado en varios foros de internet y bien situado en el centro de la ciudad. Nuestros anfitriones fueron una pareja muy maja de americanos seguidores de la religion sikh. Amantes del yoga y de la comida vegetariana, fueron muy majos con nosotros y nos trataron la mar de bien. Por $85 la noche, fue una eleccion mas que acertada.
Lo mas importante de Ottawa es el parlamento, un edificio de estilo ingles con una torre que es la viva imagen del Big Beng..... Aparte del parlamento, pues sobre todo esta pasear por la ciudad, aparte de un par de museos: el de las Civilizaciones y el de Bellas Artes.
La ciudad esta repleta de edificios del gobierno federal y de embajadas, cuyos inquilinos no parece que se hayan mudado a la ciudad mas estresada del mundo ni mucho menos.... que suerte!
El viernes por la noche nos dio tiempo a un pequeño paseo y a cenar en un restaurante acertadamente recomendado por la dueña de nuestro B&B. Se llama Elgin St. Freehouse y disfrutamos de una cena a base de langostinos y de "beef steak" muy sabrosa y un final con tarta de chocolate del que Melike todavia esta rindiendo bien ganado homenaje.
El sabado nos pusimos los abrigos y las botas de pasear a -10C y salimos a visitar la ciudad. Primero pasamos por el parlamento y subimos a la torre o "¨Bing Beng copy-paste"). Desde alli, disfrutamos de unas buenas vistas de la ciudad y del rio Outaouais, medio congelado por las bajas temperaturas. Curiosidades de la torre:
1) Dispone de una "maquina del tiempo", que es como llamaron a una cajita rellena de utensilios, juguetes, documentos, etc... de la epoca en la que se construyo (alla por el 1870 mas o menos). Esta cajita esta metida en uno de los pilares de la torre, a espera de que alla por el 20000dC alguien se digne a abrirla y vea que haciamos los "primitivos" de aquella epoca (que a tenor de como va el mundo, o nos ponemos las pilas con lo del calentamiento global o van a pensar que fuimos unos cafres).
2) El ascensor (que no la torre!) esta inclinado 9º respecto a la vertical. Por que? Pues basicamente porque, en su recorrido, el ascensor se encuentra con la sala de homenaje a los caidos en las sucesivas guerras en las que ha participado Canada a lo largo de la historia. Para sortearlo, decidieron inclinar el recorrido del ascensor durante un tramo.... se nota sobre todo al bajar. No es gran cosa, pero es curioso.
Despues de la visita al parlamento, dimos un paseo por el mercado Byward, bastante parecido al que en su momento visitamos en toronto (pero mas pequeño). Alrededor del mercado habia varias tiendas y restaurantes, entre ellos el mas conocido es el que sirve el tradicional postre "Beaver Tail" o Cola de Castor. Este postre es basicamente un gofre pero mas delgado y largo que el que todos conocemos y con la peculiaridad de que tiene la forma de una cola de castor. tradicionalmente lleva canela y azucar, aunque como todo en esta vida se ha tenido que adaptar a la demanda actual, que exige algo mas de imaginacion (chocolate, fruta, helado...etc).
Por ultimo, la tarde nos dio para dar un paseo por el canal Rideau, simbolo de la ingenieria inglesa en epoca de la guerra con los yankees. En invierno, el canal se congela y ofrece un espectaculo muy ameno de gente patinando en uno de los recintos publicos de mayor longitud de canada para la practica de este deporte.
Por ultimo, la noche nos dio para cenar y tomar unas pintas en el Highlander, un pub tipico escoces que estaba de fiesta por la celebracion del aniversario de un poeta de aquellas tierras.
El domingo tocaba retirada a nuestra añorada Montreal, pero antes nos dimos una visita por el museo de las Civilizaciones de Canada, un edificio moderno y grande y que aloja sobre todo referencias y objetos de las diferentes tribus que poblaban (y siguen poblando) diferentes territorios de Canada antes de la llegada de los colonizadores. Ingleses y franceses fueron llegando a estas tierras desde el 1500 pero, a diferencia de los vikingos, lo hicieron para quedarse y, de paso, llevarse por delante a los que habitaban las tierras y sus recursos. El museo es un homenaje muy interesante y emocionante a los "aborigenes" de Canada y a su principal reivindicacion: su deseo de continuar habitando las tierras de sus antepasados y de hacerlo como lo han hecho siempre, aprovechando los recursos naturales de una forma respetuosa con el medio ambiente..... mas claro agua.
Despues de este paseo por las civilizaciones canadienses y de un merecido agape en un restaurante de ambiente tejano (que ya nos vale), regresamos a Montreal, con la mirada puesta en el proximo fin de semana, cuyo domingo sera dedicado enteramente al disfrute de uno de los acontecimientos yankee por excelencia, la Super Bowl!!!! Ahhhh... como disfrutare viendo en pantalla gigante como unos bestias de tamaño proporcional se dan de leches por un balon de forma pepinoide. Cerveza, hamburguesa y palomitas decoraran el ambiente de esa noche y, despues de tres horas, recuperare la seriedad europea que me caracteriza.... ja! Prometo fotos....
Saludos cordiales,
Hugo
Bien, una vez superado este primer dilema de cultura geografica, pasemos a hablar un poco mas de la visita que la pareja hizo a esta ciudad el pasado finde, del 26 al 27 de enero de 2008. Tampoco nos costo mucho plantearnos la visita, ya que Ottawa es una de las pocas cosas que quedan a tiro de Montreal en coche y en menos de dos horas, por no decir la unica. Canada es grande de narices y, en cuanto quieres plantearte una visita a alguna parte interesante del pais, o te planteas 12 horas al volante o te compras un billete de avion. Tambien queda la posibilidad de cruzar al lado americano, con ciudades como Boston, NY, etc... pero es que ya solo el hecho de tener que cruzar la frontera y vertelas con los de inmigracion, a mi personalmente es que me entra la temblequera y prefiero quedarme por estos lares, no sea que la liemos.
La capital de Canada es fiel representacion del bilinguismo del pais (anglais-french :p). Esta en la frontera entre el estado anglofono de Ontario y el francofono de Quebec, solo separados por el rio Outaouais (cinco minutos para escribir el nombre... complicado verdad? ajo y agua con el frances....). Por propia experiencia, el 99% de los habitantes de Ottawa hablan los dos idiomas, aunque generalmente el principal es el ingles. El numero de habitantes oficial es de 800.000. Definitivamente, Ottawa se puede catalogar como ciudad "finde", es decir, de visita mas que sobrada en un par de dias o incluso en uno. La principal ventaja de esta ciudad es que es sumamente tranquila y no tiene el caos de trafico como sus vecinas Toronto y Montreal. Nosotros dejamos el coche el viernes noche en el hotel y no volvimos a saber de el hasta el domingo. Relajacion total en ese sentido.
En cuanto a alojamiento, el viaje fue en plan ahorro y apostamos por un B&B (cama y desayuno) bien recomendado en varios foros de internet y bien situado en el centro de la ciudad. Nuestros anfitriones fueron una pareja muy maja de americanos seguidores de la religion sikh. Amantes del yoga y de la comida vegetariana, fueron muy majos con nosotros y nos trataron la mar de bien. Por $85 la noche, fue una eleccion mas que acertada.
Lo mas importante de Ottawa es el parlamento, un edificio de estilo ingles con una torre que es la viva imagen del Big Beng..... Aparte del parlamento, pues sobre todo esta pasear por la ciudad, aparte de un par de museos: el de las Civilizaciones y el de Bellas Artes.
La ciudad esta repleta de edificios del gobierno federal y de embajadas, cuyos inquilinos no parece que se hayan mudado a la ciudad mas estresada del mundo ni mucho menos.... que suerte!
El viernes por la noche nos dio tiempo a un pequeño paseo y a cenar en un restaurante acertadamente recomendado por la dueña de nuestro B&B. Se llama Elgin St. Freehouse y disfrutamos de una cena a base de langostinos y de "beef steak" muy sabrosa y un final con tarta de chocolate del que Melike todavia esta rindiendo bien ganado homenaje.
El sabado nos pusimos los abrigos y las botas de pasear a -10C y salimos a visitar la ciudad. Primero pasamos por el parlamento y subimos a la torre o "¨Bing Beng copy-paste"). Desde alli, disfrutamos de unas buenas vistas de la ciudad y del rio Outaouais, medio congelado por las bajas temperaturas. Curiosidades de la torre:
1) Dispone de una "maquina del tiempo", que es como llamaron a una cajita rellena de utensilios, juguetes, documentos, etc... de la epoca en la que se construyo (alla por el 1870 mas o menos). Esta cajita esta metida en uno de los pilares de la torre, a espera de que alla por el 20000dC alguien se digne a abrirla y vea que haciamos los "primitivos" de aquella epoca (que a tenor de como va el mundo, o nos ponemos las pilas con lo del calentamiento global o van a pensar que fuimos unos cafres).
2) El ascensor (que no la torre!) esta inclinado 9º respecto a la vertical. Por que? Pues basicamente porque, en su recorrido, el ascensor se encuentra con la sala de homenaje a los caidos en las sucesivas guerras en las que ha participado Canada a lo largo de la historia. Para sortearlo, decidieron inclinar el recorrido del ascensor durante un tramo.... se nota sobre todo al bajar. No es gran cosa, pero es curioso.
Despues de la visita al parlamento, dimos un paseo por el mercado Byward, bastante parecido al que en su momento visitamos en toronto (pero mas pequeño). Alrededor del mercado habia varias tiendas y restaurantes, entre ellos el mas conocido es el que sirve el tradicional postre "Beaver Tail" o Cola de Castor. Este postre es basicamente un gofre pero mas delgado y largo que el que todos conocemos y con la peculiaridad de que tiene la forma de una cola de castor. tradicionalmente lleva canela y azucar, aunque como todo en esta vida se ha tenido que adaptar a la demanda actual, que exige algo mas de imaginacion (chocolate, fruta, helado...etc).
Por ultimo, la tarde nos dio para dar un paseo por el canal Rideau, simbolo de la ingenieria inglesa en epoca de la guerra con los yankees. En invierno, el canal se congela y ofrece un espectaculo muy ameno de gente patinando en uno de los recintos publicos de mayor longitud de canada para la practica de este deporte.
Por ultimo, la noche nos dio para cenar y tomar unas pintas en el Highlander, un pub tipico escoces que estaba de fiesta por la celebracion del aniversario de un poeta de aquellas tierras.
El domingo tocaba retirada a nuestra añorada Montreal, pero antes nos dimos una visita por el museo de las Civilizaciones de Canada, un edificio moderno y grande y que aloja sobre todo referencias y objetos de las diferentes tribus que poblaban (y siguen poblando) diferentes territorios de Canada antes de la llegada de los colonizadores. Ingleses y franceses fueron llegando a estas tierras desde el 1500 pero, a diferencia de los vikingos, lo hicieron para quedarse y, de paso, llevarse por delante a los que habitaban las tierras y sus recursos. El museo es un homenaje muy interesante y emocionante a los "aborigenes" de Canada y a su principal reivindicacion: su deseo de continuar habitando las tierras de sus antepasados y de hacerlo como lo han hecho siempre, aprovechando los recursos naturales de una forma respetuosa con el medio ambiente..... mas claro agua.
Despues de este paseo por las civilizaciones canadienses y de un merecido agape en un restaurante de ambiente tejano (que ya nos vale), regresamos a Montreal, con la mirada puesta en el proximo fin de semana, cuyo domingo sera dedicado enteramente al disfrute de uno de los acontecimientos yankee por excelencia, la Super Bowl!!!! Ahhhh... como disfrutare viendo en pantalla gigante como unos bestias de tamaño proporcional se dan de leches por un balon de forma pepinoide. Cerveza, hamburguesa y palomitas decoraran el ambiente de esa noche y, despues de tres horas, recuperare la seriedad europea que me caracteriza.... ja! Prometo fotos....
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Saludos cordiales,
Hugo
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